ADN
ADN
Nuestra misión
La red de Popular Democracy sabe que la gente común tiene el poder de cambiar el mundo. Le damos la vuelta a la política de siempre para crear un gobierno y una sociedad representativos y multirraciales en la que todes podamos prosperar - sin excepciones.
Nuestra estrella polar
Nuestra estrella polar es un mundo impulsado por la democracia popular.
Nos inspira la creencia firme de que la verdadera democracia se construye desde cero, por las personas que viven sus realidades cada día.
La democracia popular es el objetivo de la búsqueda incesante de una sociedad donde todes participen plenamente en las decisiones que afectan sus vidas, donde la justicia y la dignidad sean accesibles para todas las personas, y donde nuestras comunidades florezcan a través de una profunda interconexión y apoyo mutuo.
La democracia popular rompe barreras y nos une en nuestra diversidad, creando un gobierno y una sociedad multirracial donde todes prosperen, sin excepciones. Se trata de garantizar que las personas que han sido empujadas a los márgenes estén al frente del cambio, guiando el camino para transformar nuestro mundo, para que la equidad, la libertad y las oportunidades estén garantizadas para todes.
Para una sola persona u organización esto puede ser un sueño. Pero 50 organizaciones en 34 estados, unidas, pueden lograr lo suficiente para cambiar la historia.
Por quién luchamos:
Estamos en esta lucha por y para las personas que forman nuestra nación. Estamos hombro a hombro con las comunidades marginadas, de clase trabajadora y de bajos ingresos.
Luchamos por los 48 millones de personas que se identifican como negras, 20 millones de latinas, más de 70 millones de familias de clase trabajadora, y más.
Durante demasiado tiempo, nuestros números no se han representado en las decisiones que mueven nuestro país. Nuestras voces de resiliencia han sido silenciadas, nuestras caras pasadas por alto y nuestros espíritus han sido subestimados e ignorados.
Nuestra lucha es por cada persona a quien se le ha dicho que no pertenece y a quien se le ha negado el lugar que le corresponde en la mesa. Es para las que trabajan incansablemente pero permanecen invisibles, para la gente cuyos sueños son postergados por sistemas injustos, y para aquellas cuyo potencial es aplastado por la desigualdad. Para les inquilines, les trabajadores, les dueñes de pequeños negocios, les asalariades, les estudiantes, para todes.
Nuestra lucha es por el alma misma de la democracia, una democracia que sea inclusiva, participativa y que refleje el diverso mosaico que es nuestra nación. Imaginamos una sociedad en la que el poder esté realmente en manos del pueblo, donde las políticas y las instituciones sean moldeadas por quienes viven sus realidades cada día.
Por qué luchamos:
Como colectivo nacional, aprovechamos el inmenso poder y la fuerza de nuestros números para impactar el cambio en una amplia gama de temas críticos.
Juntes, luchamos por salarios justos, garantizando que todes les trabajadores puedan vivir con dignidad y seguridad.
Exigimos justicia ambiental, protegiendo a nuestras comunidades de los impactos devastadores del cambio climático y abogando por prácticas sostenibles que honran nuestro planeta.
Defendemos el derecho a la vivienda, promoviendo políticas que proporcionen hogares asequibles y seguros para todes. Nos esforzamos por la justicia en la atención médica, para que todas las personas tengan acceso a una atención médica de calidad, independientemente de su origen o ingresos.
Nuestro compromiso con los derechos de los inmigrantes garantiza que todes, independientemente de su procedencia, puedan perseguir sus sueños sin temor a la discriminación o la deportación.
Con nuestra acción colectiva, desafiamos y desmantelamos el racismo sistémico y la violencia policial, abogando por reformas que dan prioridad a la seguridad y la justicia. Amplificamos las voces que han sido silenciadas, asegurando que nuestra democracia sea verdaderamente representativa y participativa.
Para avanzar la justicia económica, trabajamos para cerrar la brecha de riqueza, abogando por políticas que eleven a las familias trabajadoras y creen oportunidades para la prosperidad generacional.
Atacamos las desigualdades educativas, exigiendo que todes les niñes tengan acceso a una educación de calidad y a los recursos que necesitan para tener éxito.
Luchamos por un futuro en el que la dignidad no sea un favor, sino un derecho fundamental. Un futuro en el que todes les niñes, independientemente de su origen, puedan crecer en un mundo que reconozca su valor y fomente su potencial. Un futuro en el que tengamos el poder y la capacidad de controlar las políticas, las instituciones y las estructuras que definen nuestra existencia.