VOTA POR COMUNIDADES
seguras
Todas las personas merecen el derecho a sentirse seguras en sus hogares y comunidades.
Todas las personas merecen el derecho a sentirse seguras en sus hogares y comunidades.
Durante décadas, las políticas punitivas, los excesos de autoridad policial y el encarcelamiento masivo han causado daños desproporcionados a las comunidades negras y a las personas de color. Debemos desmantelar estos sistemas y poner en su lugar inversiones en la salud pública, educación y recursos comunitarios. La seguridad no solo es la falta de criminalidad, debe haber justicia y equidad.
Una nueva visión de la seguridad se centra en las iniciativas lideradas por la comunidad y las prácticas restaurativas. Esto significa financiar servicios de salud mental, programas juveniles, tratamiento de abuso de sustancias, prevención de violencia, oportunidad económica y vivienda con servicios de apoyo. La seguridad verdadera se crea al empoderar comunidades, no al criminalizarlas.
Debemos elegir a representantes que promuevan políticas transformadoras y dan prioridad a las voces de las personas más afectadas por la violencia sistémica. Tenemos el poder para crear seguridad en nuestras comunidades. Comprométete a votar por la seguridad comunitaria y ayuda a transformar nuestro sistema de justicia.
La Ley Anti-Crimen del 94 contribuyó a la encarcelación masiva, el exceso de vigilancia y actividad policial y la criminalización en masa, desestabilizando a toda una generación de familias, con un impacto particularmente destructivo para las comunidades negras.